Cuando llegan los dias señalaitos!! A finales de julio, tenemos una cita en la otra orilla del río. La Velá de Santiago y Santa Ana es una de las tradiciones que mejor identifica al barrio de Triana. Pese al calor de estas fechas, muchos son los que llenan los alrededores del Altozano para celebrar una fiesta que se vive sobre todo de noche. La calle Betis se llena de casetas, donde tomarse una copita acompañada de una tapa de queso o de jamón. Al pie del viejo Wadi-al Kabir, se dan cita todas las hermandades del antiguo arrabal, partidos políticos y asociaciones deportivas y culturales como las de El Turruñuelo o Los Ángeles. Todos tienen su caseta en la Velá. En el Altozano, se instala un escenario donde se suceden cada noche las actuaciones en directo de canción andaluza y flamenco. En la edición de 2000, se ha incluido un apartado dedicado a grupos de pop rock de la tierra. Por las tardes, el plato fuerte es el concurso de La Cucaña. Los jóvenes compiten por llegar al pañuelo que se pone al final de la proa de un barco que previamente ha sido engrasada. Es un espectáculo digno de contemplarse pero hay que ir ligerito de ropa y con un buen sombrero, por aquello de que a la orilla del río a las siete de la tarde, las temperaturas son implacables. Además, hay actividades deportivas como los campeonatos de fútbol sala, petanca y pesca, y una vuelta ciclista. En cuanto a la cultura, se organizan exposiciones de pintura y cerámica, se proyectan películas en la Plazuela de Santa Ana y se monta un Ciclo de Teatro en el antiguo Hotel Triana. Los niños tienen actividades especiales todas las mañanas: gymkanas, concursos y muchos premios, sin obviar los cacharritos que se sitúan llegando a la Plaza de Cuba. El Ayuntamiento aprovecha estos «días señalaítos» para galardonar a los trianeros que han destacado en algún ámbito de la sociedad durante el año. La actriz María Galiana y el grupo Triana Pura han sido trianeros de honor en distintas ediciones de la Velá. Sin embargo, lo que más resalta de estas menciones es que cada año recaen en muchos sevillanos anónimos que a lo largo de los años han trabajado duro por el barrio. Ni que decir tiene que a los atractivos característicos de la Velá, como son las típicas almendras verdes, se unen los bares de tapas de las calles Pureza, Castilla, Betis y San Jacinto, en los que es recomendable tomar algo consistente antes de meterse de lleno en la zona de casetas. | La Gran Cucaña congrega cada año en el río a muchos jóvenes trianeros ávidos de alcanzar una banderita. A veces llegan, a veces no. Las tradicionales almendras verdes, en uno de los puestos de la calle Betis Última portada del siglo para una Velá con muchos siglos de tradición Cuando el sofocante calor de julio amaina, por la noche, es cuando la fiesta alcanza su máximo esplendor Las actuaciones en directo de la Plaza del Altozano tiene en los mayores su público más fiel Los caharritos hacen las delicias de los más pequeños llegando a la Plaza de Cuba |
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